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Más ingresos dignos para un empacador de bananos

Descubre como Víctor Pimentel logró agilizar y maximizar su tiempo de trabajo y ocio en familia

Su nombre es Víctor Manuel Pimentel, tiene 26 años de edad, vive en Villa Vásquez de la provincia de Montecristi, República Dominicana y trabaja en Kellisa II como Empacador.

Al igual que se hace con cada uno de los trabajadores que ingresan a trabajar bajo el sistema de Fairtrade, a Víctor se le explicó cada una de las ventajas que iba a lograr para él y su familia.

Víctor Pimentel

Así nos relata este joven dominicano, como acceden a medicamentos y atención médica para progresar en temas claves de salud, y de que manera gracias a la Prima Fairtrade, fue beneficiado con un bono que le permitió optimizar sus tiempos libres, mejorando su movilidad:

En mi caso yo lo utilicé para comprar un motor (una motocicleta), porque yo trabajo muy lejos y se me hacía difícil venir. Yo pasaba muchas dificultades pues llegaba tarde y me reclamaban, se me hacía bien difícil. No es lo mismo tener un vehículo que andar a pie. Me tenía que levantar mucho más temprano. Pero con ese dinero yo saqué mi motor y gracias a Dios lo pagué.

Yo me siento muy bien y feliz porque vengo a trabajar en mi vehículo. Ahora yo puedo descansar un poco más y saco a mi esposa a pasear y a mi niño. Me siento bien y de maravilla, pues si no hubiese sido por ese bono yo no hubiese tenido un motor, porque cuando yo trabajaba en otros lugares con el sueldo que tenía no podía adquirir uno; y gracias a ese bono pude conseguir ese motor!

Más ingresos dignos

Gracias al Comercio Justo, los(as) trabajadores(as) de la Asociación de Trabajadores Kellisa II en Montecristi, República Dominicana han recibido ingresos adicionales gracias a la distribución del 20% de la Prima Fairtrade, que son los recursos extra que recibe la organización por las ventas en el sistema de Comercio Justo.

Así como Víctor, al final del año cada trabajador recibe un cheque de acuerdo con el número de meses trabajados. La mayoría de los trabajadores se sienten satisfecho porque debido a que la finca está certificada, pueden salir adelante en su desarrollo económico con sus familiares. Muchos han podido adquirir electrodomésticos, saldar algunas deudas y han podido financiar familiares tanto en República Dominicana como en Haití.

Así al final de cada año los(as) trabajadores(as) de la Asociación Kellisa II cuentan con esos recursos adicionales para suplir sus necesidades y las de sus familias. Entre 2016 y 2018, la organización entregó casi 70 mil dólares en concepto de pago del 20% de la prima Fairtrade a sus trabajadores(as).

Más de 2,000 jóvenes y adultos se han graduado de cursos técnicos en la escuela vocacional de la organización, que imparte de forma gratuita clases de enfermería, manualidades, belleza, artes culinarias, informática, contabilidad, secretariado, plomería y ebanistería, con el objetivo de que trabajadores(as) y la comunidad en general puedan desarrollar habilidades diversas que les amplíen sus oportunidades de trabajo.

La organización invirtió cerca de $150 mil dólares entre 2014 al 2019 de los fondos de la prima Fairtrade, los ingresos adicionales obtenidos por las ventas de banano certificado Comercio Justo, con lo que ha logrado crear una cultura de apoyo a la educación en los(as) trabajadores(as), aumentando la matrícula educativa de sus hijos e hijas y de sus comunidades. 

Préstamos

La organización también ha dado préstamos a 150 trabajadores(as) y sus familias en territorio dominicano y también en Haití. En total han invertido $150 mil dólares de la prima Fairtrade en préstamos. En muchos casos los(as) trabajadores(as) no tienen acceso a créditos en instituciones financieras o éstos tienen muy altas tasas de interés. A través de los préstamos los(as) trabajadores(as) y sus familiares han podido costear gastos médicos, reparaciones de ventanas, pisos y techos en sus viviendas y también han podido adquirir uniformes y útiles escolares u otros artículos como motocicletas. 

Viviendas

Además, 7 familias de trabajadores(as) han sido beneficiados con proyectos de mejoramiento de viviendas, para lo cual la organización ha invertido más de $25 mil dólares de la prima Fairtrade. Ahora estas familias están más seguras ante las inclemencias climáticas gracias a que sus viviendas fueron reparadas, ahora viven más seguros y en viviendas dignas y mejoradas gracias al Comercio Justo.

Con comercio justo, tú y yo somos más, más comunidades prósperas.


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